Como atraer a los Querubines a tu casa

“Como atraer a los Querubines a tu casa”

Queridos amigos de mi blog. Aquí les he traído estos antiguos consejos que supo darme mi bisabuela Thelma, para atraer a los Querubines a visitar a diario tu casa y bendecirla con su presencia. Ella me contaba de que entre la naturaleza y el mundo invisible de los seres alados, existen alianzas y simpatías que los atraen a nuestro mundo. Por eso ella solía prohibirme con total severidad el llegar a dañar a los pájaros cantores y colibries que poblaban su jardín, pues esos pequeños seres alados simbolizaban la alianza entre el hombre y los ángeles. Existía por supuesto un favorito entre todos esos pajaritos, uno, el más pequeñito de todos, llamado colibrí o rundún. Mi bisabuela decía que si lográbamos atraer a nuestro jardín a estas bellas y coloridas avecitas, el amor y la paz en nuestro hogar serían permanentes. Ya que estos vistosos emplumados eran amigos incondicionales de los bellos Querubines, ángeles niños que siempre se deleitaban jugando con ellos. Y para atraer a estos plumíferos a nuestra casa, era menester deleitarlos con un manjar del cual ellos se alimentaban. Una enredadera llamada Pasionaria o corona de Cristo, la cual daba unos frutitos hermosos de color naranja, que adentro de su vientre poseían unas semillitas pegajosas y dulces de color oro rubí, delicia para los colibríes y demás pajaritos.

Otra de los arboles que atraían a esos pájaros sagrados, como el bello siete colores, amigos incondicionales de los seres angélicos; era el árbol llamado Tala, que daba unos frutitos pequeñitos de color amarillo naranja del cual ellos se alimentaban. Lograr que estos bellos pájaros llamados siete colores visiten nuestra morada y aniden en nuestros árboles, sería la bendición más importante que uno podría llegar a conseguir, pues tras el gorjeo de estos pajaritos llegaban también los pequeños Querubines portando sus bendiciones. Por eso les aconsejo, para que en su hogar no falten la alegría y la prosperidad, siembren enredaderas de Pasionaria y planten un árbol de Tala. Y verán con asombro que una brisa perfumada los invadirá como salida de la nada, mientras los pajaritos sagrados con sus juegos y aleteos llaman a vuestro hogar a los Seres de Luz.

Bendiciones a todos y sean amables con las aves y árboles, conviértanse en guardianes de ellos y podrán dejarle a sus hijos un mundo más bello y seguro. (Autor de este articulo: Ismael Clavero)